Así lo reveló el procurador general bonaerense Julio Conte Grand. Por la muerte de los cuatro jóvenes en San Miguel del Monte, los oficiales acusados están procesados por homicidio agravado. Cuáles son las principales hipótesis que se manejan.
Cuatro jóvenes muertos y ocho policías imputados. Una ciudad con el alma rota y varias hipótesis sobre la mesa. La persecución fatal que ocurrió en San Miguel del Monte genera cada días más interrogantes y el procurador general de Buenos Aires, Julio Conte Grand, se encargó de aclarar los últimos acontecimientos respecto a la investigación y la situación de los uniformados implicados.
Consultado sobre el abanico de versiones que circulan sobre el hecho, Conte Grand explicó que “están manejando muchas hipótesis y que ahora se abre esta segunda etapa. Si efectivamente una de las versiones es veraz, empezarán a trabajar otras unidades fiscales especializadas en delitos particulares”. Y aclara: “La acción de los policías pasa a hacer central en la investigación, se van a prestar a declaración indagatoria y aportaran sus pruebas. Veremos si surgirán testigos”
“El primer segmento ya lo tenemos reconstruido y nos permitió tomar las decisiones procesales. Hay que tener mucho cuidado. El jueves comenzamos una tarea crucial en la causa, la Justicia secuestró todos los teléfonos de los acusados y ya son analizados. Será muy importante lo que se encuentre porque nos permitirá ver contactos en los que se ramifican el delito. Nos dará la posibilidad de conectar con otros puntos para avanzar”, consideró.
Una quinta pasajera del vehículo donde iban las víctimas, se encuentra internada en grave estado y su testimonio podría ser clave para determinar lo que sucedió. Sin embargo, el procurador afirmó que no es prioridad su declaración porque hay una larga recuperación física y emocional. “Esperamos que se recupere, rezamos todos los días”.
El hecho
El lunes por la madrugada, el Fiat 147 en el que viajaban Aníbal Suárez (22 años), Gonzalo Domínguez (14), Danilo Sansone (13), Camila López (13) y Rocío (13) embistió a un camión con acoplado estacionado sobre la Ruta 3 mientras eran perseguidos por un patrullero y atacados a balazos. El auto quedó totalmente destrozado a lo largo de unos 80 metros. Solamente sobrevivió Rocío, luchando por su vida en un hospital de Florencio Varela.
Hipótesis
Familiares de Aníbal Suárez (el conductor del auto) denunciaron que el joven había sido extorsionado hace unas semanas en un control en la ruta porque no tenía los papeles del vehículo. Según al relato que Suárez les transmitió a sus allegados, él había comprado el Fiat 147 recientemente pero no había hecho los papeles para ponerlo a su nombre. Los efectivos le dijeron que le tenían que cobrar una multa de 35 mil pesos, aunque si les entregaba cinco mil, lo dejarían irse.
Suárez juntó todo lo que tenía en su casa y reunió un poco menos de la suma exigida, pero fue suficiente para que le dejaran llevarse el auto. Dos semanas después, intentaron volver a “apretarlo” y el joven decidió dejar de manejar por un tiempo.
Otra versión indica que los chicos vieron algo que no tenían que ver, y por eso fueron perseguidos por los agentes. ¿Una situación comprometedora de los hombres de la fuerza de seguridad? ¿Una transacción narco? ¿Un apriete? ¿Una extorsión?
Según constata Clarín, habría audios en los que se comenta la chance de darle 100 mil pesos al conductor del chofer del camión contra el que chocaron los chicos para que no hable, y otro sobre un negocio con droga.
